Recientemente he tenido
la oportunidad de conocer de primera mano, la iniciativa de reparación del
órgano mayor de la Parroquia de Nuestra Señora de la O de Sanlúcar, presidiada por D. Juan Celio Jacinto del Castillo
Espinosa. Dicha labor de recuperación costeada por la propia Parroquia, está
siendo realizada por el maestro organero sanluqueño D. Francisco Román Pérez, artífice
de la recuperación y mantenimiento del órgano de la Parroquia de Santo Domingo de
Sanlúcar.
Después de varios meses
de trabajo, el pasado domingo 4 de octubre, el órgano pudo ser utilizado durante
la eucaristía dominical donde tomó posesión la nueva Junta de Gobierno de la
Hermandad de la Vera Cruz de Sanlúcar. Según palabras del propio Francisco Román,
las labores de reparación del instrumento se han centrado en la reparación de
los sistemas de enganche de la consola así como en la afinación de los treinta
registros que posee el órgano, de los cuales actualmente están en buenas condiciones casi
la totalidad. El órgano “Mayor” de la parroquia fue construido en 1785 por el organero de la Catedral de Sevilla Francisco Rodríguez y modificado a principios del S. XX por el maestro organero de la seo hispalense Blas Beracoechea. A principio de la década de 1980 fue reparado por el organero y organista de la Iglesia Mayor D. Agustín Gómez Morales, que se encargó de su mantenimiento hasta el año 2010. Desde esa fecha hasta ahora, el instrumento había carecido de ningún tipo de mantenimiento por lo que su estado de deterioro lo había llevado a estar casi inutilizado.
De esta forma, gracias
al interés de la propia Parroquia y al trabajo de Don Francisco Román, Sanlúcar
está recuperando una de sus históricas joyas artísticas de más de 200 años de antigüedad
que hoy puede volver a ser disfrutada por todos.
Gracias Paco, nuestro profe de música del colegio Guadalquivir, que ahora que va a tener más tiempo se va a dedicar a tan laboriosa labor de restaurar una joya de más de 200 años de antigüedad.
ResponderEliminarQue gran labor, Paco. Muchas gracias.
ResponderEliminarMagnífica iniciativa. Esto sí que es artesanía y compromiso. ¡Enhorabuena!
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